Los jesuitas han sido expulsados de España hasta en cinco ocasiones. La primera de ellas, en 1767, les llevó al exilio durante cincuenta años y cuando regresaron no tuvieron más opción que empezar casi desde cero porque sus bienes –en lo que se ha conocido como la primera desamortización– no les fueron devueltos. Sin embargo, este éxodo no impidió que la Compañía de Jesús, que en el siglo XIX fue expulsada tres veces más, fuese capaz de reinventarse a sí misma adoptando nuevas funciones –asistir al incipiente proletariado urbano, crear centros de formación profesional, reforzar su apostolado en Latinoamérica, etc– e ideando nuevas estrategias para continuar activa durante el convulso siglo XX.
Fundada en 1540, la Compañía de Jesús comenzó su fértil andadura en Andalucía en 1554 y en los dos centurias siguientes no dejó de crecer. El último número de la revista Andalucía en la Historia dedica su tema central al estudio de esta orden religiosa que se puso a la vanguardia del catolicismo desde sus primeros años de vida. Coordinado por el profesor de la Universidad de Granada Julián José Lozano Navarro, el dosier, titulado Devoción y poder, repasa los rasgos distintivos de una Orden que tuvo en Andalucía uno de sus principales focos de acción.
Este número, que cuenta con las firmas de María Amparo López Arandia, Cristina García Oviedo, Miguel Luis López-Guadalupe Muñoz, Wenceslao Soto Artuñedo y Diego M. Molina, desvela la estrategia desarrollada por los jesuitas para acercarse a los poderosos; su monopolio de la formación de los jóvenes pertenecientes a las elites económicas y sociales, pero también de los niños y mujeres sin recursos; su impulso decidido al arte barroco; su labor como eje del catolicismo social a caballo entre los siglos XIX y XX, así como los desafíos asumidos por la Compañía a raíz del Concilio Vaticano II.
Por las páginas de este tema central desfilan edificios singulares como la Iglesia de San Luis de los Franceses en Sevilla o el Colegio de San Pablo de Granada; personalidades como la del Conde-Duque de Olivares y los Duques de Arcos; colegios como los de la Sagrada Familia (SAFA) y escuelas como la Técnica Superior de Empresarios Agrícolas de Córdoba (ETEA); Círculos católicos como el del Padre Ortega en Málaga o proyectos asistenciales como la Casa del Niño Jesús en la misma ciudad.
Cuando se va a cumplir el cuarto centenario de la firma del decreto de expulsión de los moriscos –rubricado el 9 de abril de 1609 por Felipe III– Andalucía en la Historia da cuenta de las razones oficiales y oficiosas de esta drástica decisión. Nadie, ni siquiera la Inquisición, había demandado de manera unánime que fuesen expulsados. ¿Por qué se adoptó esta medida que supuso la salida de casi 300.000 personas, dando lugar al que hasta ahora ha sido el éxodo más multitudinario de la historia de nuestro país? A través de un artículo firmado por el director de la revista Manuel Peña y de una entrevista con el hispanista francés Bernard Vincent, especialista de referencia en el estudio de los moriscos, la revista detalla los entresijos de una decisión cuyas claves hay que buscarlas, una vez más, en la política.
El nuevo número de Andalucía en la Historia, incluye asimismo un artículo del profesor de la Universidad de Sevilla Juan Ignacio Carmona que repasa el enorme esfuerzo logístico que se veían obligadas a asumir las villas cuando los embates de la peste incrementaban de forma brutal los números de muertos. Sólo en Sevilla, la peste de acabó con más de 60.000 personas, más de la mitad de su población en aquella época. Ante tan alta mortalidad los servicios municipales se colapsaban y había que tomar medidas de “urgencia”.
Tres biografías de andaluces poco conocidos ocupan las páginas del número 24 de esta publicación: la del artista baezano Gaspar Becerra, responsable de la introducción en España del modo de hacer miguelangelesco, escrita por el profesor José Luis Chicharro; la de Félix Lunar López, el revolucionario arocheno que luchó por los derechos de los jornaleros y mineros en una época especialmente convulsa, cuya vida ha sido rescatada por el archivero Félix Sancha Soria; y, por último, la del escritor bohemio, trasunto del personaje de Max Estrella de Valle Inclán, Alejandro Sawa, dibujada por la profesora de la Universidad de Granada Amelina Correa.
En el capítulo de nuestra historia más reciente, la revista repasa el destino de la guerrilla y los guerrilleros en la provincia de Huelva en un artículo del investigador onubense Pedro Feria. La profesora de la Universidad de Sevilla Guadalupe Trigueros recorre la trayectoria del Colegio Alemán de Sevilla, un centro fundado en 1921 que fue clausurado a consecuencia de la derrota de Alemania en la II Guerra Mundial y que reinició su innovadora labor pedagógica en los años cincuenta gracias al esfuerzo de la familia del cónsul Emil Plate. Por último, el escritor Manuel Huertas descubre a los lectores de la revista los entresijos de la próspera industria de caviar andaluz que, de la mano de la firma Ybarra, prosperó en aguas del Guadalquivir hasta 1970.
Andalucía en la Historia arranca con una sección de opinión en la que dos especialistas, Ángeles González Fernández, de la Universidad de Sevilla, y Andrés Sánchez Picón, de la Universidad de Almería, debaten sobre el papel representado por el empresariado en el atraso andaluz.
Asimismo, la revista invita a sus lectores a recorrer dos lugares destacados: el yacimiento ibero de Giribaile, un tesoro que bien podría ser conocido como “nuestra pequeña Pompeya”, en palabras del profesor de la Universidad de Jaén Luis María Martin Soler; y los castillos medievales de la provincia de Granada, de la mano del catedrático de la Universidad de Granada Antonio Malpica Cuello. Un artículo de Salvador Daza sobre la Andalucía pasada por el tamiz cargado de estererotipos de un reportero de The Times del siglo XIX, y un estudio de la aportación que Juan de Mata Carriazo, descubridor del Tesoro del Carambolo, hizo al Museo del Pueblo Español, que firma la conservadora Irene Seco Serra, cierran esta publicación.
La revista regala a sus lectores un DVD con el documental Triana, Paraíso Perdido, de Dácil Pérez de Guzmán, que pone el foco en la comunidad gitana asentada en el barrio sevillano de Triana desde el siglo XVI y obligada a abandonarlo ante la presión urbanística de la época del desarrollismo.
L | M | X | J | V | S | D |
---|---|---|---|---|---|---|
1
|
||||||
2
|
3
|
4
|
5
|
6
|
7
|
8
|
9
|
10
|
11
|
12
|
13
|
14
|
15
|
16
|
17
|
18
|
19
|
20
|
21
|
22
|
23
|
24
|
25
|
26
|
27
|
28
|
29
|
30
|
31
|